La Alhambra reivindica la cerámica costumbrista con la exposición ‘Barros granadinos’

Hubo un tiempo, no tan lejano, que Puerta Real se llenaba en estas fechas de puestecillos donde se vendían figuritas navideñas. Figuritas que salían de los cincuenta talleres cerámicos artesanos que llegó a haber en Granada a finales del siglo XIX y principios del XX. Una ‘industria’, esta de la fabricación de pequeñas esculturas para los belenes y otros personajes de la tradición hispana, que convirtieron a Granada en un referente no solo en Andalucía, sino incluso en toda España. Algunas con más de un siglo de antigüedad, verdaderas obras de arte, se pueden observar hasta el próximo 8 de enero en la Capilla del palacio de Carlos V, donde está instalada la exposición ‘Barros granadinos’ organizada por el Patronato de la Alhambra y el Generalife en colaboración con múltiples instituciones y particulares que han cedido parte de sus fondos como Casa Ajsaris, la Casa de los Tiros, la Fundación Rodríguez Acosta o el Museo de Unicaja.

Los que se acerquen hasta el Palacio de Carlos V podrán observar un total de doscientas piezas distribuidas en tres salas, según ha explicado el comisario Ángel Peña. En la primera, barros muy destacados de colecciones particulares «que en algunos casos es la primera vez que se muestran». Se trata fundamentalmente de tipos pintorescos de Andalucía participando en escenas costumbristas. «En la segunda -ha comentado Peña- se pueden observar esas figuras en su contexto». Así, se ha recreado un gran portal de Belén inspirado en el Albaicín y el Sacromonte gracias a la implicación del único barrista que aún subsiste en Granada, la familia Jiménez Mariscal.

En esta pequeña ciudad no faltan los vendedores de Fajalauza, los zambomberos y los paveros. No se pierda tampoco el ‘desfile’ de los Reyes Magos con el Chorrojumo a la cabeza. El recorrido por ‘Barros granadinos’ termina con la reproducción del taller donde hoy día siguen produciendo los Jiménez Mariscal. Se observan todos los útiles y herramientas que emplean los artesanos y también se proyecta un audiovisual para que los visitantes puedan ver cómo es el proceso de fabricación.

En este sentido, ha resultado muy interesante la intervención de Jesús Mariscal que, visiblemente emocionado, ha mostrado su satisfacción por que la Alhambra haya sacado adelante un proyecto que llevaba cinco años fraguándose. Mariscal ha subrayado el valor en general de todo lo que se expone en ‘Barros granadinos’, aunque sí ha destacado un par de elementos. Concretamente una maja y un majo a caballo cedidos por Casa Ajsaris y también unos bandoleros sentados en una peña. Mariscal también ha lamentado que poco a poco se están perdiendo los oficios cerámicos, «desde Fajalauza hasta el último tornero», como consecuencia fundamentalmente de la importación de mercancía proveniente de fábricas que producen en serie. «Es imposible competir con ellos», ha lamentado.

Respecto a los motivos por los que los Jiménez Mariscal ha logrado mantener su actividad pese a la feroz competencia que viene de fuera, Ernesto Mariscal, uno de los sucesores, ha señalado que sus producciones tienen salida fundamentalmente en el mercado del coleccionismo, donde sigue existiendo demanda de un producto de primera calidad y cien por cien artesano.

La directora del Patronato de la Alhambra, Rocío Díaz, ha comentado que el Palacio de Carlos V se acerca a la ciudad mostrando una tradición tan arraigada en Granada y en toda Andalucía. «Los primeros barros están datados en el siglo XVII, aunque la gran eclosión se produjo con la llegada de los románticos en el siglo XIX».

Díaz también anticipó algunas de las actividades paralelas promovidas por el Patronato con motivo de ‘Barros granadinos’, que permanecerá abierta hasta después de la Navidad. Así, hay previstos conciertos de coros en el Palacio de Carlos V los días 4, 11 y 17 de diciembre y talleres familiares el 11 y el 18 de este mes. Por último, Díaz ha recordado que la Alhambra participa en estos momentos no solo en ‘Barros granadinos’, sino en otras dos exposiciones, una en la Casa Morisca Horno del Oro sobre arte contemporáneo junto a Cervezas Alhambra y otra en el Corral del Carbón con la Fundación Legado Andalusí, inaugurada también este viernes.

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