Granada y la arrogancia
Diédhiou levanta a un rival en el partido contra el Villarreal B. /
Opinión
La plazoleta
El favoritismo le sienta fatal al club así que conviene no creer que el ascenso ahora sí se garantiza por el buen mercado invernal
El favoritismo es una etiqueta de la que el Granada debería desprenderse siempre porque le sienta fatal. Lo saben los socios que sufrieron décadas de chascos en Segunda B, con el colofón de aquel 25-J, el ‘Murcianazo’. Hasta en la temporada del ascenso a la división de plata, con Quique Pina de presidente, el equipo sufrió el vértigo del cand
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